¿sentiste meyo?

No me gustan las películas de terror, me afectan la cabeza, me trauman, puede que no tengan mucho efecto en el momento, pero una vez que estoy sola todas esas imágenes aterradoras regresan a mi mente y se reproducen una y otra vez sin que lo pueda evitar, me sugestiono, ¡¡me vuelvo loca!!. Ayer Carlos y yo fuimos al cine, queríamos la peli de los hermanos Grimm, pero nos dimos cuenta solo estaba disponible en español, así que fuchi y como queríamos entrar al cine pues decidimos ver “La llave maestra”, puf! La verdad no fue esa película la que me asusto, fueron mas bien los estupidos cortos de otra cinta que esta por estrenarse… esperen… ¿como se llama?...Pues tiene el nombre de una chica…carry? , Rose Mary? No, pero algo así, es la historia de una estudiante que es poseída por el chamuco. Puedo soportar monstruos peludos y con grandes colmillos pero si hay algo que me choca son las posesiones demoníacas en chicas y niños, no lo soporto y tampoco esos efectos que les ponen, si que saben como aféctanos los muy canallas. Pues ahí estábamos viendo la película pero nos preparamos psicológicamente para cada momento de susto, por ejemplo la clásica escena de alguien que toca a la puerta de una casa aterradora (en este caso una chica) y nadie atiende, asi que la estupida mujer entra y se empieza a oír una musiquita de suspenso, es ahí cuando nos preparamos y decimos; ahí viene el momento del susto, ya sea un gato que brinca o una persona que se aparece de pronto o algo por el estilo. Tampoco falta la escena de la regadera, ¿porque siempre hay personas bañándose en las películas de terror? ¿Por qué siempre que oyen ruidos extraños van a buscarlos lentamente? Yo no haría eso, yo saldría corriendo valiéndome pepino si fue un animal, un asesino o las tripas de alguien.