Justificante

Ahí va un soplido fuerte con todo y babas (que al cabo son de artista) pa´ el polvo que tenia esta blog, a ver si todavía jala...

No saben la cantidad de pretextos que se me ocurren para justificar mi total abandono a este querido espacio:

1.- Estuve enferma y vomitando hasta mi alma, sin ganas de comer, beber, hablar, moverme, reír, caminar y mucho menos escribir.

2.- Tuve un montonsote asi grandotototote asquerosote de trabajo y hubo días que ni dormí para acabarlo, todo sea por mi amor al cochino dinero, que asco me doy.

3.- Nos compramos (mi encantador esposo y yo) una casa y usamos los tiempecillos libres para terminar de armarla… ahí la llevamos.

4.- Me quede tullida de un ojo, me tapo el izquierdo y veo perfecto, pero me tapo el derecho y nada que ver, parece que me empine dos botellas de tequila porque veo bien doble, por eso me acerco a la compu lo menos posible pa´ mi que ya me lo fregué, de ahora en adelante lentecitos, toma vanidad en el ocicote.

5.- Hueva, pura y simple.

Bueno, pues ahí estas mis justificaciones, elija usted la que más le agrade y le acomode. Aquí andaré pues más seguido, virola o no, con dolor de panza o sin él, con casa o Homeless. Con hueva… con hueva no andaré.